Mientras el gobierno de la Comunidad de Madrid no se decide a dar marcha atrás en los recortes en la educación pública, centrados en la reducción del profesorado en los centros con sus consiguientes consecuencias (desaparición o reducción de desdobles y apoyos, supresión de la hora de tutoría semanal con los alumnos, masificación de clases...), la comunidad educativa no puede enmudecer y asumir estos recortes.
Por eso de nuevo celebramos encierros en los institutos e impulsamos la huelga de profesores y estudiantes de los días 19 y 20 de octubre como formas de alzar nuestra voz contra el sinsentido de que decenas de profesores en la Comunidad de Madrid tengan que impartir materias en las que no están formados o que los alumnos con más dificultades en su aprendizaje no puedan ser atendidos con toda la dedicación que sería necesaria. Porque si perder días de clase por las huelgas puede ser negativo para la formación de los alumnos, mil veces más negativo es que no haya profesores suficientes para atender adecudamente a los alumnos o que año tras año se inicien los cursos sin la plantilla de profesores cubierta desde el inicio o que las bajas de profesores no sean cubiertas con rapidez.
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